YPF y Pampa Energía ampliaron la potencia instalada en las instalaciones de Ensenada, con una inversión de 150 millones de dólares. Según el Gobierno, permitirá un ahorro de 350 millones de dólares en importaciones. El impacto que tendrá en el norte del país.

YPF y de Pampa Energía inauguraron la ampliación de la Central Térmica Ensenada Barragán, que demandó una inversión de 250 millones de dólares que realizaron entre ambas compañías. La potencia instalada alcanzará al equivalente del consumo de 1,5 millones de hogares.
Las obras se realizaron para llegar a 847 MW (a los 567 que ya había, se sumaron 280), por lo cual la central se convierte en una de las cuatro más grandes del país, según lo informado por las empresas.
El ciclo combinado tiene la ventaja de generar una mayor cantidad de electricidad sin consumir más combustible, ya que la turbina de vapor es alimentada por los gases que emanan las turbinas de gas existentes.
“Este proceso permite mayor eficiencia en la generación y contribuye a la sustentabilidad del sistema eléctrico nacional”, indicaron las compañías al respecto.
En el Gobierno aseguran, además, que esta ampliación de la infraestructura permitirá ahorrar 350 millones de dólares en divisas provenientes de la importación de energía.
Durante el acto de inauguración estuvieron presentes el presidente Alberto Fernández, junto a funcionarios nacionales, provinciales, municipales y directivos de las compañías, como Pablo González, presidente de YPF; Marcelo Mindlin, presidente de Pampa Energía; Flavia Royón, secretaria de Energía, y Mario Secco, intendente de Ensenada.

“Esta planta es útil para que nos ayude a reflexionar a todos sobre el momento que está viviendo el mundo y la Argentina”, aseguró el Presidente durante el acto de inauguración.
“Hablo con Lula, presidente de Brasil, hablo con Luis Arce, presidente de Bolivia, hablo con Gabriel Boric, presidente de Chile, a quienes le sempezamos a vender petróleo y gas. Podemos darle gas a Chile hoy, con un acuerdo firme, que en algún momento se quebró. Podemos proveer de gas a Europa, que le falta con motivo del conflicto bélico entre Rusia y Ucrania", afirmó.
"También esta energía nos va a permitir transformar el norte del país, porque está relacionada a uno de los minerales más buscados, el litio, fuente de energía enorme", agregó.
Por su parte, Midlin mencionó durante su discurso que "todos los gobiernos respetaron los contratos vigentes desde 2009 y 2010". "El actual lanzó el Plan Gas 5, pero el primero fue en 2013 y todos fueron respetados. Esa es la importancia de la confianza para seguir invirtiendo", afirmó y puntualizó que la empresa pasó de producir 6 millones de metros cúbicos de gas a 16 millones por el plan oficial.
Otro de los focos abordados fue el avance en la obra del gasoducto Néstor Kirchner. Una obra así requiere de dos años de construcción, según Mindlin, pero el plazo comprometido con el Gobierno es de 10 meses.
Si bien se mostró optimista respecto del cumplimiento de los tiempos pautados, planteó que será un desafío llegar al invierno de este año. "En los últimos 12 años, el gasto en importación de energía ascendió a 75.000 millones de dólares, que fueron a parar a otros países. En los reservorios teníamos esa energía. El gasoducto va a cambiar esa historia", adelantó.
En tanto, González señaló: “Estas inversiones en infraestructura energética, como las que estamos haciendo en otras partes del país, nos permiten generar la energía confiable y eficiente que el país necesita. En este caso, con menos gas vamos a generar más energía eléctrica en una zona de alto consumo industrial y residencial".