Con 24 fallecidos confirmados y más de 23 desaparecidos, los fuertes vientos agravan los incendios en Los Ángeles. Equipos de rescate trabajan contrarreloj para contener las llamas y buscar cuerpos entre las ruinas.
Los intensos vientos previstos para este martes, con ráfagas de hasta 110 km/h, representan una amenaza adicional, dificultando las operaciones de rescate y aumentando el riesgo de propagación del fuego.
Los incendios en Los Ángeles continúa causando estragos mientras los equipos de rescate trabajan para recuperar cuerpos y contener las llamas. En el séptimo día desde el inicio del desastre, las autoridades confirmaron que al menos 24 personas han muerto y 23 siguen desaparecidas. Los intensos vientos previstos para este martes, con ráfagas de hasta 110 km/h, representan una amenaza adicional, dificultando la misión de rescate y aumentando el riesgo de propagación del fuego.
La alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, alertó sobre un «comportamiento extremo del fuego» en las próximas horas.
Daños devastadores y evacuaciones masivas
Los incendios han arrasado más de 160 kilómetros cuadrados, destruyendo más de 12.000 estructuras y obligando a evacuar a 90.000 personas. Aunque algunas comunidades intentan retomar la normalidad, el temor de nuevos brotes mantiene en alerta a las autoridades y a los residentes.
El exclusivo vecindario de Pacific Palisades ha sido uno de los más afectados, con cerca de 9.700 hectáreas quemadas y solo un 14% de control del incendio. En paralelo, el foco Eaton, que devastó más de 5.000 hectáreas, tiene un 33% de su perímetro contenido.
Refuerzo de recursos y búsqueda de víctima
Kristin Crowley, jefa de bomberos de Los Ángeles, afirmó que se han desplegado todos los recursos disponibles para combatir nuevos focos de incendio. “Tenemos equipos estratégicamente posicionados para responder rápidamente a cualquier emergencia”, aseguró.
Equipos especializados con perros rastreadores recorren las zonas más afectadas en busca de víctimas. Según el sheriff del condado, Robert Luna, las tareas son extremadamente difíciles y dolorosas. «Cada día encontramos más restos. Es una tarea sombría», declaró.
Solidaridad y esfuerzos internacionales
El desastre ha movilizado a la comunidad local e internacional. Bomberos de todo el oeste de Estados Unidos y países vecinos, incluidos México, se han sumado a las labores. Benigno Hernández Cerino, un bombero mexicano, destacó el compromiso de su equipo para apoyar a Los Ángeles en este difícil momento.
Además, equipos deportivos profesionales de la ciudad, como los Lakers, Dodgers y Rams, donaron más de ocho millones de dólares para ayudar a las víctimas. Los refugios están desbordados por la cantidad de voluntarios y donaciones, demostrando una solidaridad sin precedentes.
Cambio climático y causas de los incendios
Mientras los investigadores analizan los restos para determinar el origen del fuego, expertos advierten sobre el impacto del cambio climático y la actividad humana en la frecuencia e intensidad de estos desastres. Los vientos de Santa Ana, típicos de esta temporada, se han vuelto más peligrosos debido a las condiciones secas y la expansión urbana.
En este escenario, Los Ángeles enfrenta uno de los incendios más destructivos de los últimos años. La combinación de factores climáticos y humanos resalta la necesidad de medidas urgentes para prevenir futuros desastres y proteger a las comunidades más vulnerables.
