Miles de personas murieron y al menos 10.000 se encuentran desaparecidas por las devastadoras inundaciones provocadas por la tormenta Daniel que arrasaron el este de Libia.

Decenas de miles han sido desplazados. Las peores inundaciones de las últimas cuatro décadas en el país han dejado ciudades completamente aisladas, represas y puentes arrasados, y una estela de muerte a su paso.
Según los servicios de emergencia en la zona, al menos 2.300 personas han fallecido. Solo en la ciudad de Derna se han recuperado más de un millar de cadáveres. Otras fuentes ofrecen cifras mucho más altas.
“Podemos confirmar por nuestras fuentes de información independientes que el número de desaparecidos alcanza los 10.000 por ahora”, dijo Tamer Ramadan, jefe de la delegación libia de la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y la Media Luna Roja (IFRC, por sus siglas en inglés).
Por su parte, el director para Libia del Consejo Noruego para los Refugiados, Dax Bennett Roque, indicó que el equipo de rescate en el terreno le había dicho de "decenas de miles de personas habían sido desplazadas y sin ninguna perspectiva de regresar a sus hogares".
Desde la rebelión que en 2011 derrocó a Muammar el Gadafi, Libia se encuentra de facto dividida en dos, con dos gobiernos enfrentados: un ejecutivo interino reconocido internacionalmente en Trípoli, en el oeste del país, y otro que gobierna la parte oriental de este país mediterráneo, bajo la influencia del poderoso general Jalifa Haftar, donde se presentó la tragedia.

Esto dificulta las tareas de rescate y conocer el número real de víctimas. El rescatista Kasim Al-Qatani le dijo a la BBC que no hay agua potable en Derna y faltan suministros médicos.
Añadió que el único hospital de Derna ya no podía recibir pacientes porque "hay más de 700 cadáveres esperando en el hospital y no es tan grande".
Las fuertes lluvias que se registraron el domingo provocaron el colapso de dos represas en el río Derna, “que arrastraron a barriadas enteras con sus residentes hasta el mar”, afirmó Ahmed Mismari, portavoz del Ejército Nacional Libio, que controla el este del país, en una rueda de prensa televisada.