Las siguientes imágenes llegaron a nuestra redacción y muestran veredas en estado deplorable, por eso quienes tienen dificultades para caminar deben moverse por la calle, con los riesgos que eso conlleva.
Para las personas con algún tipo de discapacidad motora ya tomar un colectivo es muy difícil y más si se vive en las afueras de la ciudad.
En el caso de depender de una silla de ruedas las dificultades se duplican porque las unidades de transporte urbano no se encuentran dotadas con un sistema para el ascenso de sillas de ruedas y las que hay se ven con la imposibilidad de usarlo por el estado de las calles y cordones.
Pero el colmo para las personas con discapacidad es el estado de las veredas en la capital jujeña que se encuentran en estado deplorable hace años como el tramo que va de Calle Otero a Sarmiento, “es una misión suicida pasar por ahí”, destacan nuestros lectores y aseguran que los arreglos no se efectúan hace años.
“Si es difícil para una persona sin ningún tipo de impedimento físico pasar por ahí, imagínese para los que estamos en silla de ruedas o para las personas invidentes, denuncio un lector”.
Por este motivo instamos a las autoridades correspondientes a tomar cartas en el asunto y garantizar la circulación de todos pero particularmente de las personas con discapacidad.